El Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural y el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) presentaron oficialmente Sinigán V6, la nueva versión del Sistema Nacional de Identificación e Información del Ganado Bovino, considerada la actualización más robusta en trazabilidad pecuaria de la última década.
La plataforma renovada permitirá identificar con precisión la cantidad de animales, los predios productores por región y asegurar información en tiempo real, convirtiéndose en una herramienta clave para la vigilancia sanitaria y la lucha contra el contrabando de ganado en el país.
Entre las novedades se destacan:
- Aplicación móvil para ganaderos y transportadores.
- Interoperabilidad con sistemas institucionales.
- Registro digital obligatorio con verificación automática.
- Custodia documental segura y validación de identidad por edad del animal.
- Información no manipulable, disponible para autoridades y productores.
Con estas mejoras, Sinigán V6 se consolida como una única fuente de verdad para la movilización bovina en Colombia, facilitando la supervisión inmediata y la toma de decisiones estratégicas en sanidad y comercio.
La ministra de Agricultura, Martha Carvajalino, afirmó que esta herramienta transformará el control sanitario y reducirá prácticas ilegales en la cadena pecuaria.
“Este sistema nos permitirá identificar la cantidad de animales y los productores predio a predio, con el objetivo de controlar el contrabando, la evasión y fortalecer la sanidad pecuaria. También nos ayudará a seguir abriendo mercados internacionales”.
Por su parte, la gerente general del ICA, Paula Andrea Cepeda Rodríguez, destacó que la actualización es un paso decisivo para la competitividad del sector:
“Con SINIGAN V6 fortalecemos la trazabilidad, la movilización y la comercialización del ganado, garantizando legalidad, control sanitario e información confiable. Esta evolución amplía las capacidades de fiscalización y verificación en campo”.
Con más de 2 millones de empleos y 700.000 productores vinculados al sector ganadero, esta modernización se proyecta como un impulso clave para la productividad, la bioseguridad y la apertura de nuevos mercados internacionales para la carne y los productos lácteos colombianos.
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